[08-09-24] La comunidad claretiana de Lleida se despidió ayer de la ciudad y del barrio de Balàfia con la celebracion de una misa en la parroquia de Sant Antoni Maria Claret. La comunidad parroquial quiso homenajear de esta manera a los tres padres que dejan la ciudad tras 140 años de presencia claretiana, una semana antes de la despedida oficial, que tendrá lugar el día 14 con una eucaristía presidida por el obispo Salvador y el provincial de los claretianos, y que también servirá para presentar al nuevo párroco del templo, mosén Víctor Martínez.

Después de la eucaristía, la actividad se trasladó al Centro Cívico de Balàfia, que acogió un emocionante acto de homenaje a los tres últimos padres claretianos que han ejercido su servicio en Lleida. Se trata de Dionisius Paskalis, Josep Vilarrúbies y Nemesi Solà, este último con 40 años en Lleida.

Los religiosos claretianos, que tenían atención pastoral de la parroquia de Sant Antoni Maria Claret, comunicaron en el mes de abril que cerrarían la comunidad y dejarían la ciudad a finales de agosto a causa de una reorganitación por falta de vocaciones. La comunidad había perdido, en enero, a uno de sus miembros, el padre Jaume Sidera.