La residencia de Santa Teresa Jornet de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados de Aitona ha celebrado esta tarde los 150 años de la fundación de la Congregación de las Hermanitas, que tuvo lugar el 27 de enero de 1873 en Barbastro de la mano del sacerdote Saturnino López Novoa, con la ayuda de la santa aitonense, Teresa Jornet. Los residentes, el personal que los atiende y las hermanas que integran el orden en Aitona han compartido una eucaristía presidida por el obispo Salvador. 

En su homilía, el prelado ha destacado la importancia de la "paciencia y el agradecimiento", en palabras que ha dirigido tanto a la gente mayor que vive en la residencia, como a aquellas personas que tienen cuidado de ellas. El obispo ha destacado la importancia de la obra que llevan a cabo las Hermanitas de los Ancianos Desamparados, que ya llevan un siglo y medio de actividad al servicio de las personas mayores. También ha querido subrayar que hoy también se cumplen años de la canonzación, en 1974, de santa Teresa Jornet, a manos del papa san Pablo VI.

La capilla de la residencia de Santa Teresa Jornet estaba llena en una jornada tan señalada para la comunidad religiosa que está a su cargo y para todos aquellos que viven allí y reciben sus atenciones.