|12-03-24| Más de 65 mujeres y hombres, por separado, han participado en el receso de Emaús en Lleida este mes de febrero. Esta es una experiencia de 48 horas en que los asistentes "se apartan" del día a día para vivir una vivencia del amor de Dios. La experiencia está basada en la Lectura del Evangelio Lucas 24: 13-35, en la cual dos discípulos caminan solos y tristes hasta que Jesús Resucidtado se pone a andar con ellos, pero algo impide que sus ojos lo reconozcan. Aun así, Jesús no les deja solso en su desesperanza y en su desilusión. Les acompaña y camina con ellos. El receso, pues, está basado a hacer entender que Jesucristo camina siempre a nuestro lado, que nunca nos deja solos, sino que somos nosotros quienes no somos capaces de reconocerlo.
 
El Receso de Emaús es una de las actividades que tiene más éxito actualmente. Es un apostolado de las parroquias –en Lleida, a la de La Mercè- que impulsan los laicos, con el acompañamiento espiritual de los sacerdotes. Todo el mundo puede participar: laicos, consagrados, católicos formados, sin formación, practicantes o no, ateos u otras religiones. Según la delegación de Apostolado Seglar del obispado "es una experiencia única que hay que vivir personalmente para comprenderla y para sentir la sutilidad con la que el Señor toca el corazón de cada uno para transformar su vida".