Infancia e ingreso en el seminario.
En Grijalba (Burgos), el 19 de abril de 1885 nacía el niño Perfecto. Sus padres, Antonio y Benita, le bautizaron el mismo día de su nacimiento. Recibió la primera comunión el año 1893 y la confirmación, el 24 de mayo de 1895, en la iglesia parroquial de Santa María de los Reyes de Grijalba.
El 20 de febrero de 1898 ingresa en el seminario marista de Burgos, siendo uno de los primeros hijos de san Marcelino Champagnat de nacionalidad española.
Hasta 1901 realiza los estudios correspondientes del postulantado y noviciado; y al final de este periodo hizo los primeros votos, el 6 de agosto de 1901. A continuación, en San Andrés de Palomar (Barcelona), cursa durante un año; los estudios pedagógicos y de metodología necesarios para impartir la docencia.
Vida docente y perfil religioso.
Su primer destino fue el colegio marista de Murcia donde ejerció de cocinero y luego de profesor.
También desempeñó su docencia en las ciudades de Valencia, Pamplona... En 1923 le destinaron al colegio de Lauria, 58 (Barcelona). Al fundarse, en agosto de 1924, el Colegio de Santa María de la Victoria de Málaga, los superiores le eligieron para esta fundación con el cargo de subdirector. En agosto de 1933 fue nombrado director, cargo que ocupaba en la persecución de 1936.
El H. Guzmán era una persona de grandes cualidades: prudencia, comprensión, rectitud, diplomacia, amor a los pobres y obreros... A ellas añadía un corazón bondadoso. Los alumnos veían en él a un profesor, ingenioso y ocurrente, sus materias eran seguidas con interés. El H. Guzmán se distinguió por su amor a Jesucristo en la cruz y en el sagrario y por su devoción a la Santísima Virgen.
En la perfección de 1936.
A partir del 19 de julio de 1936, todo fueron dificultades para la comunidad de los Hermanos Marístas: tuvieron que huir al monte, vieron arder el colegio... y como las cosas tomaban mal cariz, animó a los hermanos, les dio una cantidad de dinero y les recomendó serenidad y prudencia. Y se dispersaron.
El H. Guzmán y el H. Fernando María fueron detenidos cerca del colegio y llevados a comisaría. Puestos en libertad, van a la fonda de la calle Santa María, 13 y de ésta al Hotel Imperio, desde donde seguía el paradero de los Hermanos.
Un mes más tarde, el 23 de agosto de 1936, por la noche, se presentaron en el colegio tres coches para llevarse a los «frailes».Solamente hallaron a tres; comenzaron las indagaciones y la búsqueda de los Hermanos que faltaban. Tomaron declaración a los criados, quienes les dijeron que se hallaban en el Hotel Imperio; de aquí fueron conducidos al Comité de Salud Pública y desde allí a la cárcel de Málaga.
El martirio.
La turba revolucionaria asaltó la cárcel, sacaron a setenta y seis presos, los metieron en un camión y en una cuneta, no lejos de la cárcel, los asesinaron. Era el 24 de septiembre de 1936.
El H. Guzmán repetía: «No temo morir, como tampoco temí vivir». No recibió la muerte ni por sus ideas políticas ni por venganzas personales sino por su condición de religioso marista. Sus restos mortales descansan en la catedral de Málaga.
H. Mariano SANTAMARIA